EL CRUCERO CRUZADO, INFORMACIÓN INESPERADA Y EL INDESEABLE OLOR A CHAMUSQUINA.

Este es uno de los relatos que forman parte, por orden, de la serie La señora Abbot:
La señora Abbot, el doctor en casa...
Efectivamente un violinista...3
El panadero y su falso positivo...
Alcohol, no gracias...1
Alcohol, no gracias...2
Alcohol, no gracias...3
El amanecer willkommen...
La señora Abbot y el pan...1
La señora Abbot y el pan...2
La señora Abbot y el pan...3
La señora Abbot y el pan...4
La señora Abbot, el nombre del violinista...1
La señora Abbot, el nombre del violinista...2
La perspectiva hace la forma...
¿Por dónde iba...?
Ventajas y desventajas...1
Ventajas y desventajas...2
La perfecta alineación de unos zapatos...
El trastorno borderline...
La señora Abbot se va de vacaciones
El crucero cruzado, información inesperada...
El triatlón, la función musical para público especializado...
La señora Abbot, la pajarita que jugaba al póker y el momento...
Muchas pajaritas para tan poca isla...
Logaritmos neperianos...
La señora Abbot: Jana, si vuelves, limítate a los detalles, por favor I
La señora Abbot: Jana, si vuelves, limítate a los detalles, por favor II
La señora Abbot y el patrón inevitable de lo que vendrá.
La señora Abbot: tejiendo el inconsciente y sus patronistas.

-¿Qué haces tú aquí?-preguntó Jana totalmente desconcertada.
-No tengo ni idea todavía. Dímelo tú- respondió Tau sorprendido de verla tomando el sol en la cubierta tumbada en una butaca.
-¿Yo?- repreguntó poniendo la mano derecha delante de sus ojos para que el sol no la cegase- ¿Debo saberlo yo?
-Es lo que intuyo. En pleno mes de agosto, en un crucero que hace escala en Formentera, Malta y las islas griegas, creo yo que...deberías saberlo.
-Mira Ataulfo, tu pensamiento relacional está falto de energía por lo que puedo observar- dijo reincorporándose para hablar con él desde una postura más equitativa.
-Perdona...Jana...-se rindió-es que a mí no me gusta el mar, yo soy más de montaña, y estoy aquí con mi mujer y mis hijos...pasando una semana de crucero. No sé por qué accedí. El último algoritmo indicaba coordenadas intermitentes y mi mujer insistió tres veces en hacer un crucero... Las coordenadas coincidían con la ruta del crucero¿comprendes? Creí que mi radar relacional me llevaría hasta la respuesta y aquí estoy.
-Sin duda, tiene que significar algo- expresó preocupada.

Fuente imagen: tumblr
Autor: Federico Hurtado
Título: Canción rota.

De repente, por el otro lado de la cubierta, en la que daba la sombra, pasaba rápido con su instrumento, el vecino violinista.

-¡No! No puede ser, tiene que ser una broma.
-¿Qué? ¿Qué pasa?-preguntó Tau girándose.
-¡Mi vecino!
-¿El violinista?
-El mismo.
-¿También está aquí? ¡No puedo creerlo! Pues entonces es que..¡algo nos a traído hasta aquí a los tres!
-Sin duda, algo tiene que ser...
-Pero ¿el qué?- piensa rápido Jana-instigó dándole un golpecito en el homoplato.
-¿Yo? ¡Con lo bien que estaba yo de vacaciones! No os había recordado ni un segundo, ni señales ni nada de nada!- sus manos recorrían toda la cara arrastrándose por ella y su lamento- ...un momento ¿no lo hueles?- interrumpió sorprendiéndose olisqueando-¡Otra vez ese olor a quemado! ¿No lo hueles?¡No puedo creer que esté pasando otra vez!
-A ver, no te pongas nerviosa. Sí, huele a quemado y me temo que, si los patrones se repiten... vas a oler a chamusquina todo el viaje-dijo Tau moviendo las manos en modo calma- piensa, relajada...no pasa nada, no pasa nada-se autoconvencía con los nervios asomándole hasta por los ojos.
-¿Qué no pasa nada? ¿Cómo que voy a oler a chamusquina todo el viaje? ¿Sabes algo? ¡Tú ya sabes que algo va a pasar! y ¡los tres hemos coincidido en el mismo sitio! Esto debe ser algo muy grave. Tau... olor a chamusquina, fuego, fuego y mar...mal, ¡muy mal...!pero... un instante...-caviló-eso sería lo más fácil. Las relaciones no son tan fáciles...nunca son tan fáciles...piensa...piensa...
-No tiene porqué-contestó absolutamente tranquilo- Lo que tienes que hacer es seguir así...pensar y relacionar, tranquila...-proseguía midiendo las palabras para no entorpecer su inicial lanzamiento de relacionar pensamientos-Yo no he traído más que la calculadora. Corrijo, el teléfono móvil, con calculadora. No creo que pueda ayudarte demasiado con las  matemáticas...-dijo sacudiendo la cabeza desilusionado.
-Lo que tenemos que hacer es buscar a James. ¡Eso! Eso es lo primero que vamos a hacer- expresaba ordenándolo todo. Su cabeza y sus ideas relacionales, podían esperar aunque, funcionaban a la perfección...en segundo plano.


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