Redescubrir la historia de Cerdanyola a través del bosque

Can Catà abre 80 hectáreas de su entorno natural para divulgar la flora y fauna y el pasado de la finca

Uno de los lugares más embleáticos de la zona de Can Catà

Uno de los lugares más embleáticos de la zona de Can Catà

Propias

El bosque de Can Catà es una de las joyas más curiosas y encantadoras de la Cerdanyola del Vallès forestal. Escondido en el camino que lleva a la masía del mismo nombre y a la iglesia de Sant Iscle de les Feixes, el Bosc Gran de Can Catà propone este fin de semana un paseo rodeado de aires de otoño, tierra húmeda y recuerdos del siglo pasado.

A comienzos del siglo pasado, Collserola no disponía de la misma cantidad de vegetación que tiene ahora. Los pinos no eran tan numerosos ni altos, si bien ofrecía rincones donde el agua era abundante y la sombra, agradecida. "Es aquí donde mi abuelo, Leopoldo Gil Llopart, hizo construir una mesa de piedra de 20 metros de largo para 40 comensales y un anfiteatro para celebrar su convite de bodas", explica Xavier Gil, responsable del espacio Can Catà Natura.

El área se creó en 1912, cuando se casó por tercera vez tras la muerte de sus dos primeras esposas en el parto de sus hijos. Es uno de los rincones más curiosos del Parque Natural de Collserola y su anfiteatro sirve de muro de contención para evitar desprendimientos de la montaña. Gil Llopart se casó en petit comité, por lo que el espacio era idóneo. Para ello también habilitó un lugar donde almacenar los alimentos durante toda la jornada, una especie de nevera natural como la de las antiguas masías, que aprovechaba la sombra para mantener frescas las viandas y bebidas.

El escenario de aquél banquete se encuentra al final de uno de los dos caminos del Bosc Gran de Can Catà, situado en el valle de Les Feixes y que hoy en día goza de la sombra y el crujir de los pinos centenarios que custodian el camino hacia la fuente que preside la mesa. El recorrido permite conocer la vegetación y la fauna característica del Parque Natural de Collserola, como los robles, el pino piñonero, el pino blanco, el brezo, el madroño o las lianas características del bosque mediterráneo.

Actividades de divulgación
El espacio Can Catà Natura aprovecha la riqueza de su entorno para divulgar las características del parque. Para ello, la apertura del bosque se complementa con actividades dirigidas a escuelas y grupos entre semana.

"Entre semana realizamos actividades como escuela de medio ambiente, con diferentes itinerarios y recorridos, tanto fotográficos como de paseo, dirigidos a niños desde P2 hasta jóvenes que cursan Bachillerato", señala Gil. Para no dañar el entorno natural, ha aprovechado la profesión tanto de él como de su mujer, la fotografía, para retratar todas las variedades herbarias de la zona e ilustrarlas así a los visitantes.

Coincidiendo con la proximidad de la Castanyada, los alumnos visitan los castaños que presiden la entrada de la masía de Can Catà para conocer la diferencia entre los que dan buenos frutos y los que no. La visita acaba con un juego de pistas por sus jardines, donde entre otras existe la leyenda que un dragón reside en la cueva del lago.

+ VALLÈS OCCIDENTAL

Siga la actualidad de la comarca del VALLÈS OCCIDENTAL a través de las secciones locales de Sabadell y Terrassa de LaVanguardia.com. Noticias, reportajes, entrevistas, imágenes... ¡la información más cercana!
Síganos también en la cuenta de Twitter de Vallès Occidental,  @VallesOcLV .

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...