Black Dog: los sueños de Paul Nash es un proyecto artístico inspirado en la Primera Guerra Mundial fuera de lo normal. No se puede esperar menos de un comic basado en la vida de un pintor surrealista que pasó por uno de los mayores conflictos bélicos de nuestra historia. Dave McKean es el encargado de llevar a cabo esta aventura que, para amantes de la cultura moderna, es imprescindible.
En primer lugar vamos a ponernos en situación: Paul Nash es un artista londinense famoso por sus pinturas surrealistas. Él nació a finales del siglo XIX por lo que le tocó vivir de muy joven la Primera Guerra Mundial (1914 – 1918), en la que sirvió y luchó, teniendo eso, como es de esperar, una gran influencia en su visión del mundo. Aunque ya era famoso antes gracias a alguna exposición y su formación en las mejores academias de Chelsea, Londres, su obra se tornó en gran medida paisajes bélicos y de trinchera. No contento con eso, veinte años más tarde, se hizo periodista y cronista y, pese a estar muy enfermo, fue testigo de numerosas batallas en la Segunda Guerra Mundial (1939 – 1945). Una vuelta a los orígenes digamos. Y alguien así de atípico merece ser estudiado y su historia merece ser contada, y por eso tenemos Black Dog: los sueños de Paul Nash.
Las reflexiones de los artistas que han pasado por una guerra son dignas de ser vistas, leídas o escuchadas. Nos sirven para conocer de primera mano la historia y la relevancia de los acontecimientos del momento, y para plasmar que la propaganda bélica y los episodios heroicos poco tienen que ver con la realidad de una guerra. Así pues, este tomo nos lleva a una realidad un tanto complicada.
Para llevar a cabo qué pasaba por la cabeza de Paul Nash y plasmarlo en viñetas hacía falta dos cosas: un dibujante a la altura de la fama del artista, alguien que estuviese interesado en la historia y, sobre todo, un conocedor del personaje que iban a tratar. ¿Difícil verdad? Pues no tanto si sabes que existe alguien llamado Dave McKean que enamoró a todos los que estaban interesados en lanzar este proyecto para dar a conocer el enfrentamiento de principios del Siglo XX. Es decir, Jenny Waldman, directora del proyecto 14-18 NOW y Jule Tait, directora del Lakes International Comic Art Festival. Y el resultado se nota en cuanto a calidad, entendimiento de la materia y, como es evidente, en dibujo y guion.
Es decir, que Dave McKean nos arrastra con dibujos de toque surrealista a la cabeza de Paul Nash mientras este lucha en la Primera Guerra Mundial. Y lo hace con tiento y talento, cambiando de estilo de un capítulo a otro, volando desde unas viñetas clásicas hasta unos collages de gran elaboración pasando por imágenes grandes que rinden tributo a los paisajes originales del pintor. Así que podemos encontrar ya dos ventajas en esta obra: quienes conozcan al artista surrealista y disfruten de su arte, se van a ver envueltos de nuevo en su magia, aunque sea con los trazos y pinceles de un allegado. Por otra parte, si eres un curioso es buen primer paso para andar un camino que te va a llevar a profundizar más, conociendo así la vida e influencias que marcaron al reputado personaje. Ahora bien, esto es una espada de doble filo: si eres fan de los cómics al uso, siguiendo una estructura típica, con encuadres no forzados, esto te va a romper un poco los esquemas, así que mejor que vayas preparado. Por otra parte, si lo tuyo no es el dibujo modernista y las plasmaciones surrealistas es muy probable que tampoco disfrutes del todo, porque te tiene que gustar. Además, ten en cuenta que sumado a los trazos hay reflexiones, textos y una trama. Es necesario que sepas a lo que vas y es cierto que esto puede despistar un poco ya que se sale de la norma, pero eso no le quita calidad.
Por otra parte decir que la edición de tapa dura de ECC Comics, a 18 euros, es una auténtica pasada. Todo el arte está plasmado de manera espectacular y puede incluso pasar por catálogo de museo grande y editado genial a la vez que de comic muy recomendable. Además, sumado a las viñetas a todo color, en las últimas páginas nos podemos encontrar bocetos que, aunque no se publicaron, nos sirve para conocer los primeros pasos de esta obra.
Apuntado para cuando haya la oportunidad. Gracias por tu recomendación!