Todos tenemos un nombre desde el día que nacemos.
Un nombre que nos define y que aunque será una de las palabras más importantes en nuestra vida, no nos pertenece.
Es decir, seguramente con la vida habrás aprendido que hay otras muchas personas que se llaman como tú. Otros Antonios, Jaimes, Juanes, y Anas, mucho más reconocidos que tú
Cuando nacemos nos otorgan un nombre pero se va construyendo a medida que nos relacionamos con el entorno y la gente que nos rodea con el tiempo. Poco a poco vamos construyendo un significado de quienes somos y lo que significa ese nombre para los demás. (Juanito el listo, Ana la rebelde, Sergio el responsable…)
Los nombres se llenan de contenido y se atribuyen con el tiempo.
Piensa en FUSIÓN, un segundo… imagina un autobús en tu ciudad con la palabra FUSIÓN en grande. ¿Qué es?
Estoy seguro que si vives en España, eres del 80% que piensa en el producto de telecomunicaciones convergente de Movistar, ¿cierto?. Seguro que es de las primeras cosas que te han llegado a la cabeza. Este es un gran ejemplo de que los nombres se construyen y no se otorgan.
Aunque hoy relaciones Fusión con Movistar, Fusión lleva existiendo en España muchos más años que los que Movistar lleva utilizándolo. Hace más de 20 años que conoces Gillette Fusión, la maquinilla con más hojas del mercado…
¿Qué ha pasado?
El nombre no es de quien lo tiene, sino de quien lo construye.
Este es uno de los principales retos de las Marcas, la apropiación de su nombre para construir su significado propietario y representativo. Más allá que sea registrable, el nombre de tu Marca necesita mucha más ayuda para que te represente a ti y no a tu vecino.
El nombre de una Marca necesita:
1.
Ser Registrable
Evidentemente si no puedes proteger legalmente tu nombre en los mercados claves, no tienes Marca. La protección legal en las clases de Niza adecuadas es fundamental para iniciar el camino de apropiación de un nombre.
2.
Ser Apropiable
Hay una diferencia notable entre Apropiable y Registrable. Registrable es la posibilidad legal de obtener un registro, y Apropiable es la posibilidad de impedir que nadie nunca se llame como nosotros: Fusión es registrable (Movistar Fusión, Gillette Fusión, y si quisiéramos Iberia Fusión…), y WiZink es apropiable.
3.
Ser Singulares
¿Recuerdas a aquel niño o niña de tu clase con un nombre especial? Pues lo mismo nos ocurre con las Marcas.
Cuanto más singular, más personalidad tenga nuestro nombre, más fácil será que podamos construirlo y atribuirlo a nuestra compañía. No es lo mismo construir tu Marca sobre una empresa que se llame CT que sobre una que se llame BOMBARDIER.
4.
Ser Significativo
El nombre tiene que ser capaz de construir un significado, de contar una historia. Hoy no es tan importante el nombre, como la capacidad que tenga de contar algo.
Tu nombre es una caja vacía que se llena con el tiempo, pero si partimos de un nombre que nos permita contar una historia será más sencillo atribuirlo. No es lo mismo llamarte HABITA, que DOSPUNTOS… el segundo te puede contar que es el lugar dónde empieza tu historia… todo lo que quieres siempre viene después de los dos puntos (Queridos Reyes Magos: )
5.
Ser Identificable
No importa lo bueno que seas y lo lejos que quieras llegar si nadie conoce cómo te llamas.
Esto va de construir nombres con el tiempo, y eso significa estar presente en la vida de los demás. Ser visible, comunicar, interactuar, relacionarte… existir.
Al final no conocerán al mejor, sólo al que más ven.
6.
Ser
Y la última y más importante, el nombre es lo que nos define pero no construye lo que somos. Lo que somos lo construimos nosotros.
Toda Marca tiene un nombre, aunque no todo nombre tiene una Marca.
Tan importante es que te conozcan como el concepto que tengan de ti, y ese concepto dará sentido a esa relación. Seguro que el nombre de tu pareja no es la primera vez que lo escuchas en tu vida, pero este en concreto es diferente a todos los demás.
La construcción de una Marca no consiste en vestir algo y ponerle un nombre, sino en crear percepciones y significados que me identifiquen. Y eso sólo se consigue con consistencia en lo que somos.
Y recuerda, pon tu nombre y apellidos en Google y entenderás que tu nombre, no es sólo tuyo y que lo que importa es que tú seas más importante para los que te rodean, que el otro.
En fin, construye tu nombre.
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