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Hace tres meses llegó a la gerencia de Andercol con esta consigna: “crecer el negocio de forma sostenible y rentable”. Y prueba de que lo que pregona es alcanzable se traduce en que acaba de concretar uno de los negocios clave en la expansión de la empresa, con un costo de doce millones de dólares.
Además, se apresta a firmar un convenio con un socio estratégico, que seguramente le permitirá a la compañía alcanzar mercados al otro lado del océano.
Se trata del químico santandereano Rodolfo Bayona, quien responde por la operación que esta filial del Grupo Orbis tiene en Colombia, Venezuela, Ecuador, México y Brasil.
En diálogo con El Colombiano, el empresario explicó la visión de negocio que la compañía tiene en el mediano y largo plazo.
¿Cuál es el alcance de la compra que hace Andercol de la planta industrial de Polisuin, en Cartagena?
“Era algo que estaba en los planes de negocio y nos permitirá estar más cerca de los mercados a los que exportamos. Cartagena será clave para traer la materia prima, transformarla y volverla a sacar, con lo que deben mejorar la rentabilidad y el crecimiento. Esta es la inversión más grande que estamos haciendo este año, por doce millones de dólares, sin contar las mejoras que debemos hacer, y la idea que tenemos de poner más reactores”.
¿Cuándo toma el control Andercol de ese complejo?
“Tomaremos el control el primero de agosto y la intención es duplicar su producción y llevarla de 20 mil a 40 mil toneladas de resinas, anualmente, en los próximos tres años”.
Con esta incorporación, ¿cómo queda la estructura de producción de la empresa?
“Quedamos con plantas en Medellín y Barbosa en Antioquia, Cartagena en la Costa, pero como grupo químico de Orbis tenemos plantas en Venezuela, Ecuador, México y Brasil”.
Luego de perfeccionar este negocio, ¿qué otras posibilidades se ven?
“Estamos mirando posibilidades todo el tiempo para crecer con nuestros productos en otros países y desarrollamos acuerdos con compañías que nos permiten llegar a otros mercados. Estamos a punto de cerrar un acuerdo con un socio estratégico que nos permitirá llegar a otros quince países, vendiendo soluciones. Sabemos que el crecimiento estará en los países en desarrollo y es donde estará el consumo de materias primas”.
Pero, ¿es un socio local o extranjero? ¿Qué mercados le abrirá a Andercol?
“(Risas) Es un socio. Ahora no le puedo decir nada más, pero nos dará la posibilidad de pasar el océano”.
Y en los países en desarrollo, ¿qué oportunidades tiene la empresa?
“En América Latina se invertirán 20 mil millones de dólares en proyectos de infraestructura, en los próximos años, porque los gobiernos han reconocido que la única forma para que la industria local compita es con ayuda de la infraestructura y esperamos participar en eso y capturar una buena porción de ese crecimiento. sabemos que Brasil construirá 200 hospitales y contempla inversiones por tres trillones de dólares en infraestructura. La oportunidad está en ese tipo de mercados y estamos posicionados para capturar parte de ese crecimiento”.
Mientras esas posibilidades llegan, ¿qué evolución tuvo el primer semestre de este año?
“La dinámica del primer semestre en Brasil fue muy difícil y estuvimos muy retados. La rentabilidad no es buena y el Mundial hizo que la producción industrial decayera. En Colombia hay dificultades para competir, porque en la estructura de la industria química no se producen monómeros y nos toca importar esa materia prima, con un costo del transporte muy alto, cinco veces que en Estados Unidos, lo que nos impacta demasiado. Pensamos que la adquisición en Cartagena no ayudará a corregir esos efectos”.
Y la segunda parte del año...
“Para este segundo semestre somos positivos en toda la región, exportaremos más y esa vocación es la que queremos elevar. Una de las áreas en las que participamos como filial de Orbis tiene que ver con todo aquello que denominamos hábitat e involucra todo tipo de infraestructura, viviendas, vías, así que estamos atentos a las oportunidades”.
Mencionó las dificultades para conseguir materia prima, ¿cómo lo resuelven?
“Hemos experimentado una volatilidad inmensa por lo que sucede en el Oriente, los precios se disparan a futuro y algunas de las grandes productoras de monómeros han tenido eventos de fuerza mayor y paran las plantas, entonces hemos tenido variaciones en precios que no son fáciles de transferir al mercado. Así que somos muy eficientes y hemos invertido mucho en investigación y desarrollo, lo que nos permite tener una disciplina en el proceso de manufactura muy bueno que nos ayuda a absorber un poco las diferencias de precios”.
¿Qué otras fortalezas en innovación tiene Andercol?
“Somos reconocidos por el grupo de Investigación y Desarrollo, tenemos convenios con Colciencias y son 60 personas que desarrollan tecnología para que nuestros clientes nos prefieran. Como le dije anteriormente, nos toca absorber las variaciones de precios en materias primas mediante mejoras y eficiencias operativas y tecnología”.
Y los logros...
“En Brasil, por ejemplo, nos hemos integrado un poco hacia adelante y hemos desarrollado lavaderos con materiales que nosotros producimos. Allá hemos comprado maquinaria para desarrollar ese tipo de mobiliario, dado el potencial y tamaño que tiene ese mercado”.
Y ese tipo de desarrollos, ¿se traerán a Colombia?
“En Colombia no hay jugadores tan grandes que se interesen en comprar una prensa de tres mil millones de pesos para hacer lavaderos en resina. Prevemos que eso crezca en América Latina, en la medida en que el estándar de vida de la población mejore o que la clase media se vuelva más grande, entonces es posible que ese tipo de productos se empiecen a consumir más. De eso hay muchos ejemplos, otro es el de postes para tendidos de redes eléctricas y líneas que hoy son de concreto, pueden hacerse de fibra de vidrio y resina con menos peso y mas fáciles de transportar”.
¿Está en los planes de Andercol convertirse en productor de ese tipo de productos?
“La razón de ser del negocio químico no es desarrollar ese tipo de piezas, es desarrollar la tecnología para que sean nuestros clientes quienes los hagan de manera exitosa. No somos un proveedor de materia prima somos un proveedor de soluciones. Nuestro compromiso es proveer la tecnología y ayudamos a crear prototipos. Si hay una empresa que quiere incursionar en esos negocios y tenemos clientes que cuando tengan volúmenes importantes los podríamos apoyar”.