Continúa el malestar en algunos sindicatos de trabajadores y sectores políticos de la ciudad por el anuncio que el viernes hizo el alcalde Dionisio Vélez sobre la prórroga al contrato de prestación del servicio agua potable y saneamiento básico a la empresa Aguas de Cartagena. (Lea aquí: El Distrito prorroga por 13 años el contrato a Aguas de Cartagena)
“Los trabajadores de Aguas de Cartagena rechazan enérgicamente la prórroga por 13 años para la prestación de los servicios de acueducto y alcantarillado suscrito por el alcalde Dionisio Vélez Trujillo, faltando aún seis años para la culminación de lo pactado inicialmente, teniendo en cuenta el incumplimiento en la transferencia de tecnología, recuperación de las pérdidas de aguas no contabilizadas, el desplazamiento de personal calificado de la empresa y la tercerización en la contratación con empresas de suministro de personal sin experiencia”, manifestó ayer, a través de un comunicado, el Sindicato de Trabajadores y Empleados de los Servicios Públicos, Corporaciones Autónomas, Institutos Descentralizados y Territoriales de Colombia, Seccional Cartagena, que agrupa a los trabajadores de Aguas de Cartagena.
El concejal del Polo Democrático, David Múnera, se ratificó en solicitar a la Fiscalía, Contraloría y Procuraduría que investiguen de oficio al Alcalde por la prórroga anticipada del cuestionado contrato.
Carlos Coronado, secretario General de la Alcaldía, indicó dicha prórroga obedece a “la toma de acciones tempranas que obligan a ejecutar en forma oportuna la ampliación del sistema de acueducto y alcantarillado, y extender este servicio a zonas subnormales, suburbanas y corregimientos que carecen de este”.
Voces en contra
El viernes durante la asamblea general de accionistas de Acuacar, el Alcalde anunció el alargamiento del contrato con la empresa, que se firmó en 1995, por 26 años. Aseguró que el acuerdo se logró a cambio de inversiones por más de 250 mil millones de pesos de parte de Acuacar, que garantizarán la construcción de una segunda planta de tratamiento de agua para el acueducto de la ciudad y garantiza el suministro de agua a los cartageneros durante los próximos 30 años. También se condicionó a la empresa a que no incremente las tarifas, más allá del crecimiento normal, según dijo el mandatario.
El concejal Múnera sostiene que antes de que esto se acordara se debió consultar con la población, discutir el tema en el Concejo de Cartagena o permitir que incluso otros operadores hubiesen competido en licitación. “Solamente quienes esconden pretensiones torcidas se reúnen clandestinamente para hacer negocios tan importantes para una ciudad como Cartagena, con el objetivo de prorrogar un contrato, el cual le falta una vigencia aún de seis años. El Alcalde está caminando por el filo de las normas, puesto que no existe ni una sola razón válida para prorrogar un contrato con seis años de anticipación, sobre todo en un servicio que es público y cuyo común denominador en el mundo es que su prestación se está reversando al Estado”, explicó el cabildante, añadiendo que el año pasado había advertido sobre lo que supuestamente se tramaba en el contrato de concesión con Aguas de Cartagena.
“Esa empresa obtiene grandes utilidades con base en caras tarifas y pésima prestación del servicio, haciendo cortes programados en diferentes zonas populares, con altos ingresos operacionales, pagando una mano de obra barata a los trabajadores en su mayoría tercerizados, mientras a sus directivos los recompensa con altísimos salarios, todo a costilla de los cartageneros”.
En una protesta realizada frente a las instalaciones de Aguas de Cartagena, en el barrio El Prado, un día antes del polémico anuncio, trabajadores de la empresa y comunidad manifestaron su preocupación por la prórroga del contrato. Pedían al Alcalde que cualquier propuesta del grupo empresarial que maneja a Acuacar debía ser socializada con los cartageneros. Los empleados explicaron que temen por su estabilidad laboral, ya que ante la prórroga del contrato por 13 años más, la empresa posiblemente trabajaría con contratistas por lo que empleados directos estarían en riesgo de perder su trabajo. La comunidad señalaba que en la zona el servicio es deficiente. (Lea aquí: Comunidad y trabajadores de Aguas de Cartagena protestaron en El Prado)
“Palos en la rueda”
“Hoy Cartagena produce cerca de 218 mil metros cúbicos de agua tratada al día. Con inversiones del Distrito y el Gobierno Nacional se ampliará a 230 o 240 mil metros cúbicos día, pero en 4 años ese volumen será insuficiente por el crecimiento de la ciudad y la planta actual (la del barrio Paraguay) no se puede ampliar más. Por ello, la decisión está tomada y la segunda planta se hará en obras que demorarían unos 4 o 5 años”, precisó el alcalde Vélez durante la pasada asamblea de socios de Acuacar.
El Universal intentó comunicarse nuevamente con el mandatario para obtener una respuesta directa sobre las posteriores dudas generadas en cuanto al tema, pero no fue posible. En su lugar, Carlos Coronado dijo que las acciones tomadas por la Administración Distrital corresponden a una respuesta para atender las necesidades de la ciudadanía en cuanto a la progresiva demanda de agua en Cartagena originada por su crecimiento urbanístico, garantizando el acceso a agua potable y saneamiento básico.
“Eso es lo que está haciendo el Alcalde, responder a las necesidades, dándole la cara a los cartageneros, con una adecuada infraestructura en servicios para que siga siendo competitiva y sostenible. De eso se trata, el resto son ganas de ponerle palos en la rueda a un proceso que no lo va a detener nadie”, aseveró el Secretario General.
Opinan los cartageneros
El Universal hizo un sondeo de opinión a través de redes sociales para conocer la posición de los cartageneros respecto a la polémica prórroga.
-“Sí me parece acertada la renovación del contrato. Creo que la culpa del deterioro de la red de suministro no es de ellos, es una red vieja y a ellos les ha tocado la engorrosa tarea de reconstruir. Claro que hay cosas que mejorar en el servicio, pero considero que cambiar el operador sería traumático para los cartageneros”, dijo Johnker Santamaría.
-“Busquemos otra empresa con más garantías y con calidad de servicio, es hora de ponernos a la vanguardia”, opinó Justin Pinzón.
“Sí estoy de acuerdo, porque de solo pensar en las antiguas Empresas Públicas (que ofrecieron el servicio de acueducto y alcantarillado en Cartagena hasta 1995), me produce angustia”, comentó Margarita Domínguez.
“Es una arbitrariedad del señor Dionisio Vélez, ya que no se entiende cómo prorroga un contrato al que le faltan 6 años para su terminación, cuando a este funcionario le faltan escasos 9 meses para salir del cargo. Eso debe negociarlo el próximo Alcalde con la entidad que le brinde más garantías a los cartageneros”, consideró Juan Carlos Cárcamo.
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