Mala, inversión en urnas electrónicas

De ser un estado a la vanguardia por implementar en su legislación electoral el voto electrónico y la adquisición de urnas electrónicas, Jalisco retrocedió en este tema y perdió la supremacía que tenía sin posibilidad de poder recuperarse.

Jesús Ibarra Cárdenas, académico del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) y el ex presidente del entonces Consejo Electoral y académico de la Universidad Panamericana (UP), José Manuel Barceló Moreno, reconocieron que la ventaja que llevaba nuestro estado con la experiencia adquirida en el voto electrónico se perdió.

Descartaron que de manera unilateral nuestro estado pudiera usar las urnas electrónicas que quedaron de las mil 200 compradas, porque la decisión se toma en las oficinas centrales del Instituto Nacional Electoral (INE), el cual tiene la facultad exclusiva de tomar las decisiones en cuanto a comicios de todo el país.

“Ese proyecto de urna electrónica, que era de los proyectos líderes de Jalisco, en el que se distinguía a nivel nacional en cuanto a fiabilidad electoral, y una manera mejor de hacer las cosas, se vino abajo después de la reforma de 2014, y volvimos al papel”, afirmó Ibarra Cárdenas.

Los principales perdedores fueron los jaliscienses porque regresaron al modelo tradicional de boleta en papel, cuando se pensaba evolucionar al voto electrónico con cada elección.

Barceló Moreno reconoció que se realizó una fuerte inversión, 37.4 millones de pesos, que no se está aprovechando y “como no se permitió usarlas, me parece que eso deviene en un gasto inútil”, porque ya no se usan en elecciones constitucionales y para eso se compraron.

“Es lamentable que en Jalisco, las urnas (electrónicas) se hayan comprado, que estén cayendo en desuso sin haberse utilizado, salvo el uso que tuvieron en una elección”, expuso.

Calculó que el costo de esta compra, pese a ser alto, a la larga abarata el costo del sufragio electoral, pero a nivel nacional no se apostó por esta vía.

“Ahí están (las urnas), ahora lo que se tiene que hacer es un gran esfuerzo de creatividad para sacarles el mayor jugo posible porque el gasto está hecho y no fue cualquier cosa”, comentó.

El 1 de noviembre de 2011 se autorizó la adjudicación de mil 200 urnas electrónicas a la empresa Pounce Consulting por 37.4 millones de pesos, y debía entregarlas el 15 de enero del año siguiente, pero incumplió. Ya le habían pagado la mitad de la inversión total.

Se dio un segundo plazo para el 24 de febrero de 2012, y tampoco lo cumplió. Tres días después sólo había entregado 603 equipos y la entrega completa se logró hasta el 3 de marzo.

Estos equipos representaron 11.21 por ciento de las 8 mil 817 casillas instaladas en 43 municipios para las elecciones del 1 de julio de 2012.

Antes se habían usado en los municipios de Tuxcueca, San Cristóbal de la Barranca y Gómez Farías.

Sólo faltaba presupuesto

El académico de Estudios Sociopolíticos del ITESO recordó que el único problema que tenía Jalisco para operar el voto electrónico era de pesos y centavos para contar con el equipo suficiente para cubrir todo el territorio jalisciense.

Aseguró que el órgano electoral ya había sorteado muchos problemas sobre ganar la confianza de la sociedad y los partidos políticos, definir las características del equipo ideal, adquirir unas urnas que cumplieran las especificaciones y garantizar la seguridad y secrecía del voto emitido. Todo eso se perdió.

“Lo único (que preocupaba) era el precio, que aparentemente era caro. Caro en el corto plazo, pero si esas urnas se seguían utilizando en diversas jornadas electorales en muchos años, iban a pagar el costo, a largo plazo iban a salir hasta más baratas”, comentó.

Desde 2009, Jalisco comenzó a realizar fuertes inversiones para este fin y ahora el gasto quedó sin poderlo desquitar. La decisión de centralizar las elecciones tomó a todos los estados por sorpresa.

El ex consejero electoral reconoció que la inversión en urnas electrónicas es alta, pero se compensa por los beneficios de seguridad en el voto que otorga y se elimina la necesidad de comprar material electoral cada tres años, el cual después va a la basura y ya no se recupera nada.

“Si funcionaran como deberían de funcionar, quizás fuera un remedio para amortiguar este alto costo. Si se usan las urnas electrónicas y se guardan y se vuelven a utilizar, no va a ser necesario estar comprando material electoral cada tres años como suele ocurrir”, precisó.

Ibarra Cárdenas recalcó que se eligió el distrito 1, el que está en la zona norte del estado y de más difícil acceso, para que fuera la prueba de fuego, ya que si se lograban sortear todos los inconvenientes que representaba cualquier otro lugar del estado sería pan comido.

“Era un modelo de urna sencillo de entender, incluso era más fácil que un cajero electrónico. Tenía su pantalla táctil, además aparecía un testigo de voto, con lo cual tú te llevabas una cierta garantía de qué fue lo que votaste y los mismos partidos y funcionarios de casillas podían verificar esos testigos”, precisó.

El 4 de abril de 2014 nació el Instituto Nacional Electoral (INE) provocando la desaparición del Instituto Federal Electoral (IFE), y con él se unificaron las elecciones federales y locales.

Académicos descartan usarlas

Para estos investigadores universitarios la prohibición de que algún estado pueda implementar de manera única el voto electrónico, aunque sea para sus connacionales en el extranjero, está prohibida.

Consideraron que con las últimas reformas electorales se perdió la posibilidad de volverlas a usar porque se creó una ley general que unificó la forma de votar en todos los estados.

“No se pueden usar para elecciones constitucionales porque la propia Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales no lo contempla, y hay una instrucción directa del INE en la que no se puede utilizar”, comentó Ibarra Cárdenas.

Aseguró que esta última reforma electoral nacional en vez de beneficiar al estado lo perjudicó al quitarle las ventajas que llevaba con organizar comicios sin quejas sobre el voto electrónico.

Barceló Moreno aseguró que si la ley electoral permitiera el uso de las urnas electrónicas habría elecciones electorales más económicas y seguras a la larga; sin embargo, los que generan la desconfianza son los partidos políticos en lugar de los ciudadanos.

Piden fomentar el uso de urnas

Para evitar que las urnas electrónicas de Jalisco se oxiden y para desquitar la inversión de 37.4 millones de pesos, hay que fomentar los otros usos: contabilizar elecciones en escuelas, sindicatos, partidos políticos o toda aquella organización que lo requiera.

Estas urnas podrían tener otro uso más significativo si los gobiernos en funciones solicitan someterse a la revocación de mandato o se promuevan otros mecanismos de participación ciudadana.

“Un área donde pueden utilizarse porque es local y ahí tendrían mucho futuro, es ahora con los nuevos mecanismos de participación ciudadana, las elecciones sobre esos mecanismos como plebiscito, referéndum o iniciativa popular, ahí sí pudieran ser utilizadas”, aseveró el especialista en temas políticos, Jesús Ibarra Cárdenas.

Este académico del Iteso consideró que la inversión realizada se puede desquitar con estos ejercicios ciudadanos, que son poco promovidos.

“Para aprovecharlas, y que no quede esa inversión ociosa, y para que no quede el proyecto en el hoyo porque fue un proyecto exitoso”, comentó.

En cinco años han participado en 260 consultas y contado alrededor de 300 mil votos.

Mayoritariamente se han solicitado por particulares y organismos públicos para elecciones de sociedad de alumnos o presentaciones; otros casos menores han sido para elecciones de consulta ciudadana sobre algún tema o elecciones de integrantes de consejos o comités de los partidos políticos o sindicados.

El ex presidente del entonces Consejo Electoral, José Manuel Barceló Moreno, aseveró que deben buscárseles otros usos para desquitar la inversión.

Mencionó que deben fomentarse los simulacros de elección, sobre todo en las escuelas, para promocionar el voto.

“Sí, las urnas electrónicas están subutilizadas, no se pueden utilizar por mandato del INE en elecciones constitucionales, y lo que valdría la pena es que el instituto (local) las empezara a promover para su uso en mecanismos de participación ciudadana, por ahí podrían tener un buen futuro”, precisó Ibarra Cárdenas.

Cifras:

1,200 urnas electrónicas

37'411,113 pesos de inversión

260 consultas ciudadanas donde se usaron

2 distritos electorales y un municipio donde se utilizaron de manera oficial

Consultas en que se han usado la urna electrónica                   

Año      Consultas

2012    46

2013    55

2014    76

2015    51

2016    32

Total   260

En el estado

Otros usos de urna

-Elecciones de escuelas, sindicatos y partidos políticos

-Revocación de mandato

-Iniciativa Popular

-Referéndum

-Consulta ciudadana sobre diversos temas

HJ/I