La Corporación Autónoma Regional del Río Grande de la Magdalena, Cormagdalena advirtió sobre la presencia de una corriente de material flotante de unos 7 km de largo y 10 metros de ancho aproximadamente - en su mayoría madera-, que circula por el Río Magdalena, con origen en la desembocadura del río Carare, en Santander.
Según el director ejecutivo de Cormagdalena, Capitán Luis Álvaro Mendoza Mazzeo, “se trata de una abundante palizada, compuesta en un 80% por madera que se detectó al final de la tarde de ayer. Sabemos que proviene del río Carare y ya estamos en coordinación con la CRA y la alcaldía de Barrancabermeja para verificar cual puede ser el origen”.
Indicó que por el momento se extiende una alerta a todo tipo embarcaciones y propietarios de equipos estacionarios localizados entre Barrancabermeja y Barranquilla tales como muelles flotantes para que tomen las precauciones del caso ante la presencia de esta maderada que baja por el Río Magdalena. Así mismo, a las bocatomas de los acueductos e instalaciones de bombeo de agua que estén localizadas en el cauce principal.
“Tan pronto se detectó esta palizada en el río, el asociado Navelena activó un plan de mitigación de emergencia a la altura de Barrancabermeja y no se presentó ningún incidente que lamentar”, señaló Mendoza Mazzeo.
Aclaró que la velocidad a la que avanza esta maderada - en las actuales condiciones promedio de nivel y caudal-, no alcanzaría los 2 m/s (7.2 km/hr) en general. Esto, según un análisis preparado por el Centro de Investigación Científica del Río Magdalena, CIRMAG, sobre las velocidades para una zona entre el Magdalena Medio y Bajo que puede servir de referencia para analizar el fenómeno que está ocurriendo.
De acuerdo a dicho análisis, a una palizada que no tiene más poder que la velocidad superficial del Río, le tomaría alrededor de 4 días para recorrer la distancia de 630 km, distancia que separa a Barrancabermeja de Barranquilla. A la capital de Atlántico se estima llegará el 1 de junio al medio día y al municipio de El Banco en la madrugada del 29 de mayo.
TRIPLE A ANUNCIA MEDIDAS
A su turno la empresa Triple A entrega un parte de tranquilidad a los usuarios en el sentido de que la calidad del agua potable no se verá afectada con el paso de la “maderada” por aguas del río Magdalena, fuente de abastecimiento de Barranquilla y las 14 poblaciones donde opera, teniendo en cuenta que no se trata de un material peligroso y se ejercen estrictos controles en la captación y tratamiento.
No obstante, la compañía tiene activadas las medidas preventivas para tratar de evitar que los troncos, madera y material que viene arrastrando el río puedan taponar las bocatomas o bombas de las estaciones.
Triple A recordó que en los cuatro (4) puntos de captación (Acueducto de Barranquilla, Las Flores, Sabanagrande y Ponedera) se cuenta con un sistema de boyas o “barricadas flotantes” para minimizar la entrada del material que viene arrastrando el Magdalena.
En el caso del Acueducto de Barranquilla existe, adicionalmente, un sistema de desbaste o rejillas para retener sólidos y desechos.
Triple A cuenta, las 24 horas del día, los 7 días de la semana, con monitoreo en línea y un centro de control para la operación y supervisión automática de los diferentes procesos, así que su personal técnico está muy atento con este fenómeno natural.
En cuanto a los desechos (madera y/o troncos) que queden esparcidos en las playas, Triple A estará presta a recibir la solicitud de servicio que haga la administración municipal de Puerto Colombia para proceder a la recolección, transporte y disposición final de estos residuos.
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