Camina 12 horas para estudiar

Fredy Figueroa tiene 16 años y cursa el 3° año en la Escuela de Alternancia N°1. Vive en Caspalá, un paraje al que se llega por un sendero entre los cerros. Más al oeste, por el mismo camino, está Tilcara. “ Para venir a la escuela demoro casi 12 horas ”, cuenta Fredy, y aclara que, para no cansarse, hace un alto en Valle Colorado. Allí, si tiene suerte, alguien lo puede acercar los 13 kilómetros que le quedan hasta la escuela.

Del otro lado del río Valle Grande, donde los lugareños pescan truchas, hay un sendero de herradura en zigzag que trepa por la empinada pared del cerro El Bañado: “Por ahí me voy caminando tranquilo entre los venados y los cóndores que vuelan como si me estuvieran acompañando”, describe.