El alcalde de Magangué, Marcelo Torres Benavides, negó que se haya producido un atentado en su contra como se especuló el fin de semana. Pero dejó claro que uno de los escoltas, un policía que presta guardia en su vivienda hizo un “disparo de advertencia” al notar que unas personas, al parecer, se escondían entre los carros que a esa hora parquean en inmediaciones de su casa y entre árboles en ese sector.
“Eso ocurrió entre las 12:30 y 1 de madrugada del sábado. El hecho se presentó justo en el momento cuando no había servicio de energía en la población. Él ve el movimiento extraño y hace el disparo de advertencia y las personas parece que huyen. No se como quieran llamarle a eso, pero fue lo que realmente sucedió”, precisó el mandatario local.
Para Torres Benavides todo se volvió mucho más preocupante cuando el mismo sábado, ya mucho más tarde, dos concejales, Ubadel Arrieta y Marlon Díaz, fueron amenazados de muerte, vía telefónica. Les advirtieron que no votaran por unos proyectos de acuerdos presentados por la Administración local.
A esta situación, según el alcalde Torres, el viernes, el secretario de Educación, Rafael Rodríguez Chávez, también fue objeto de amenazas, hechas con recortes de periódicos y en donde en una hoja de papel le escribieron: ‘Me las vas a pagar por lo que hiciste, tú y tu familia’.
Para el Alcalde de Magangué tales situaciones ameritan una exhaustiva investigación de parte de la autoridades, pues las amenazas a los concejales se dan justo cuando se entró a debatir la incorporación de recursos de la vigencia anterior al nuevo presupuesto.
Adicionalmente, la Oficina de Control Interno separó de sus cargos a tres rectores de colegios oficiales al hallarse unos presuntos malos manejos de los recursos que les llegan a esas instituciones educativas.
“Respaldamos al Secretario de Educación y repudiamos desde todo punto las amenazas en contra de estos dos concejales. Rechazamos todos estos hechos y seguiremos tomando las medidas que sean necesarias para el fortalecimiento del estado de derecho”, expresó el alcalde de los magangueleños.
Según Torres Benavides el método de la “intimidación”, que a su juicio, se dio en años anteriores se quiere volver a tomar a Magangué y que desde su llegada a la administración se propuso acabar con tales prácticas.
“Nos propusimos desterrar, definitivamente, la intimidación. Estamos empeñados, desde nuestra llegada la Alcaldía, desterrar esa práctica que por años merodeaba por aquí. Esta Administración rechaza cualquier acto que pretende intimidar a los funcionarios, concejales o cualquier persona. Llamamos a la ciudadanía magangueleña a cerrar filas contra el retorno a nuestro municipio de aquellos nefastos procedimientos intimidatorios”, dijo.
El mandatario pidió a las autoridades resultados en las investigaciones que se adelantan por estas amenazas.
Habla la policía
El comandante de la Policía de Bolívar, coronel José Miguel Correa Hernández, indicó que efectivamente un uniformado de la institución se vio obligado a hacer un disparo ante una situación que le generó sospecha por la presencia de unas personas desconocidas. Sostuvo que se presentó una situación en el momento cuando todo estaba en medio de la oscuridad por la falta de la energía eléctrica. Sobre las denuncias de amenazas a dos concejales y el Secretario de Educación de Magangué, expresó que ya se iniciaron las investigaciones.
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