¿Celestino V un papa modelo? La leyenda y la realidad

Junto a san Francisco, Jorge Mario Bergoglio ha elegido como su guía a san Pedro de Morrone, Papa durante pocos meses a los 85 años de edad. Pero según los historiadores ese pontificado fue desastroso

por Sandro Magister




ROMA, 12 de julio de 2014 – "Estos dos santos han dado el ejemplo. Sabían que como clérigos – uno era diácono y el otro obispo, obispo de Roma – los dos debían dar el ejemplo de pobreza, de misericordia y de despojo total de sí mismos".

Es de este modo que Jorge Mario Bergoglio ha indicado como su modelo a dos santos: no sólo el previsible Francisco, de quien tomó el nombre, sino también el inesperado Pedro de Morrone, Papa durante pocos meses, en el año 1294, con el nombre de Celestino V.

Lo hizo el 5 de julio en Isernia, ciudad que reivindica los orígenes de Celestino V, en el día aniversario de la elevación al papado de este santo.

Aquí está justamente la novedad. Como Papa, Celestino V jamás ha sido particularmente apreciado por sus sucesores antiguos y recientes. Más bien lo han recordado y admirado por su “humilde” renuncia al pontificado y más todavía por su anterior vida santa como ermitaño.

Por el contrario, Francisco ha celebrado y señalado como su modelo a Celestino V, justamente como “obispo” de Roma y pontífice. Por haber efectuado – dijo – con su despojo de sí y con la primacía dada a la misericordia de Dios, una elección “contracorriente, no sólo como ascesis personal sino como testimonio profético de un mundo nuevo".

En efecto, en torno a Celestino V floreció rapidísimo la leyenda, antes que fuese hecho santo en el año 1313.

Escribe su más acreditado biógrafo, el historiador alemán de la Iglesia, Peter Herde, en el documentadísimo perfil de Pedro de Morrone-Celestino V, publicado por él en la calificada "Enciclopedia dei papi", editada en Italia por el Instituto Treccani, síntesis de una biografía más amplia aceptada y apreciada también por los más encendidos "celestinianos":

"Se comenzó muy pronto a individualizar en Pedro-Celestino, sobre la base de la estela de las especulaciones escatológicas de Joaquín de Fiore, a ese Papa angélico que, según las profecías difundidas a partir de la mitad del siglo XIII, habría inaugurado la época de los monjes, purificado la Iglesia, reconquistado Jerusalén y preparado el retorno de Cristo".

Pero ésta es la leyenda, porque si se lee el capítulo de la biografía de Herde sobre el brevísimo pontificado de Celestino V, la realidad que aparece es muy diferente.

Es muy distinta también de la idealización que el papa Francisco ha hecho del pontificado de ese predecesor suyo.

Pedro de Morrone fue elevado al papado el 5 de julio de 1294 con el voto unánime de una docena de cardenales, luego de un tormentoso cónclave que duró más de dos años.

En ese momento él tenía 85 años. Consagrado a la vida ermitaña, había fundado una congregación de monjes, posteriormente llamados Celestinos, incorporada a la Orden benedictina y rápidamente enriquecida con iglesias, monasterios y tierras agrícolas al sur de Roma, gracias a numerosas donaciones.

Pedro de Morrone fue totalmente ajeno a las maniobras que llevaron a su elección como Papa. Escribe Herde:

"Los cardenales intentaron elegir en él a un candidato de compromiso como solución de transición, escogiendo un eremita inexperto, muy adelantado en años, quien prometía ser un Papa no demasiado severo. Fue por cierto una decisión insensata, porque Pedro carecía de todas condiciones para dirigir la Iglesia con éxito: el conocimiento del complicado aparato curial, del Derecho Canónico, de los problemas espirituales y políticos. Además, era demasiado viejo para poder adaptarse a las nuevas tareas".

Al enterarse de su elección, en su ermita de Sulmona, Pedro de Morrone fue presa del pánico, pero aceptó cuando le dijeron que, si la rechazaba, cometería pecado mortal. El que lo sostuvo y lo tranquilizó en su nueva tarea fue sobre todo un monarca en quien depositaba gran confianza: Carlos II de Anjou, rey de Nápoles y sobrino de Luis IX, el santo rey de Francia, que desde allí en adelante ejerció una pesadísima influencia sobre el anciano.

Carlos II organizó la ceremonia de coronación del nuevo Papa, pero no en Roma – donde Celestino V no residió jamás – sino en L’Aquila, ciudad que estaba dentro de sus dominios. Pedro hizo su ingreso sentado en el lomo de un asno, tomando el ejemplo de Cristo, generando en el pueblo la idea que finalmente había llegado el Papa angélico de las profecías. Después se estableció en Nápoles, la capital, donde el rey de Anjou lo rodeó con hombres propios, además de llenar con privilegios reales los monasterios fundados por Pedro, que no los rechazó, aunque personalmente siguió manteniendo una vida austera, en una celda arreglada expresamente por él en Castelnuovo.

El 18 de setiembre Celestino V creó nuevos cardenales. A propósito de ello escribe Herde:

"El largo cónclave había demostrado la necesidad, pero también Carlos II debió haber impulsado al Papa a dar este paso. Era muy importante para el rey introducir personas de su confianza en el colegio cardenalicio, también en previsión del próximo cónclave. Las facciones nobiliarias romanas no vieron reforzadas sus propias filas, más bien, entre los nuevos cardenales ni siquiera uno provenía del Estado de la Iglesia. De los doce cardenales creados por Celestino (el número doce se refería, en sentido escatológico, al número de los apóstoles) solamente cinco eran italianos: Tomás, de Ocre, y Francisco, de Atri, ambos frailes de la congregación del Papa, el benedictino Pedro de L’Aquila, obispo de Valva y Sulmona, el napolitano Landolfo Brancaccio, hombre de confianza del rey de Anjou, y Guillermo Longo, de Bérgamo. Entre los siete franceses hubo dos monjes que Celestino jamás había visto".

Escribe también el historiador alemán:

"Era cada vez más evidente que el ingenuo anciano no estaba en condiciones de gobernar la Iglesia. En la 'plenitud de su simplicidad', como destacaron sus adversarios, distribuyó beneficios, dignidades y prebendas personales. Su honradez fue explotada cínicamente por cardenales como Jacobo Colonna y Hugo Aycelin y por funcionarios de la curia. En esta situación comenzaron a criticarlo también los que hasta entonces lo habían apoyado. Jacobo de Todi, en una de sus loas, le advirtió respecto a los peligros inherentes a su oficio".

Es por eso que Celestino V comenzó a pensar él mismo en su dimisión. Sus proyectos de abdicación fueron examinados escrupulosamente desde el punto de vista jurídico. Y el 13 de diciembre, en Castelnuovo de Nápoles, leyó su declaración de renuncia frente a los cardenales reunidos. Se despojó de las vestiduras pontificias y se puso de nuevo la túnica gris de su congregación: el Papa había vuelto a ser Pedro de Morrone. Su pontificado duró cinco meses y nueve días. Falleció el 19 de mayo de 1296 a los 87 años de edad.

__________


El texto íntegro del perfil de Pietro de Morrone escrito por Peter Herde para la "Enciclopedia dei papi" Treccani:

> Celestino V, santo


__________


El discurso del papa Francisco en Isernia, el 5 de julio de 2014, para la convocatoria del año jubilar celestiniano "durante el cual se abrirá para todos la puerta de la divina misericordia":

> "Misericordia è profezia di un mondo nuovo…"

__________


El recuerdo de Pedro de Morrone-Celestino V hecho por Benedicto XVI en Sulmona el 4 de julio de 2010, en el ochocientos aniversario del nacimiento del santo:

> A "seeker of God"

En la basílica de Collemaggio, en L'Aquila, en abril del año anterior, el papa Joseph Ratzinger había depositado en el sepulcro del santo el palio recibido en día de inicio de su pontificado.

__________


En la miniatura reproducida en esta página, extraída de los ‘Vaticinia de Pontificibus’ del siglo XV conservados en la Biblioteca Británica, Celestino V es retratado en el momento en que un zorro lo agrede por la espalda, teniendo entre sus dientes las cintas de la tiara, aludiendo a su abdicación del pontificado.

__________


Traducción en español de José Arturo Quarracino, Buenos Aires, Argentina.

__________


Para otras noticias y comentarios ir al blog de Sandro Magister en lengua italiana:

> SETTIMO CIELO



__________
12.7.2014 

rss.gif