SORPRESA EN EL SUBURBANO

La CUP atribuye a la "moral cristiana" el revuelo por el coito en el metro de Barcelona

La diputada Anna Gabriel, de la CUP.

La diputada Anna Gabriel, de la CUP. / periodico

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La diputada Anna Gabriel, de la CUP, considera excesivo el revuelo surgido a raíz de la filmación de una pareja que mantenía relaciones sexuales en el metro de Barcelona y lo atribuye al “puritanismo”, la “reacción conservadora” y la “moral cristiana” reinante en la sociedad . “No encuentro normal que le demos tanta bola”, ha subrayado Gabriel en declaraciones a la emisora RAC1. “Son muchos años de Iglesia católica y de Santa Inquisición en este país que tenemos”, ha insistido.

Gabriel justificaba de esta manera a su compañera de filas Mireia Boya, quien, en declaraciones a Catalunya Ràdio, había considerado “normal hacerlo en el metro” y que el incidente “se había magnificado”. "Practicar sexo no es pecado. Hay temas sociales mucho más importantes en el debate público", dijo Boya. Gabriel, no obstante, ha reconocido que si ella se encontrara en el metro y observara un episodio similar ”es muy probable“ que le “llamara la atención” y que incluso le generaría “unas risas”.

Concretamente, Boya afirmó el lunes en el programa L’Oracle, de Catalunya Ràdio, que "practicar sexo no es pecado". "Es un lugar público. Ha sorprendido, pero me parece una tontería que se haya magnificado un hecho que es habitual". "Hay cosas mucho más importantes de las que hablar en este país", insistió. También cuestionó la diputada de la CUP que se quiera multar a los dos jóvenes y preguntó "en qué código legal está escrito que está prohibido este tipo de prácticas en el espacio público?" "El sexo es normal entre los jóvenes, aunque sea en el andén", defendió.