Pajares podrá abrir al cien por cien el primer día de la temporada, siempre y cuando, eso sí, haya nieve para ello. La dirección de la estación invernal lenense apuntó ayer que los trabajos de la revisión extraordinaria del telesilla del Brañillín, principal remonte del complejo, marchan a buen ritmo y estarán finalizados antes de la fecha fijada para el inicio de la campaña, el 4 de diciembre. Por lo tanto, los esquiadores sólo tendrán ahora la única incertidumbre, que no es poca, de si la nieve llegará a la Cordillera para quedarse o, por el contrario, se esfumará como ya pasó con la nevada caída hace un par de semanas.
La adjudicación de la revisión del telesilla del Brañillín fue más costosa de lo previsto. Tras iniciar un primer proceso en el verano, el concurso quedó desierto. Casi a contrarreloj, el Principado iniciaba una nueva licitación en octubre a la que sí se presentaron dos empresas, aunque también hubo problemas. Deportes no cerró el contrato con la ganadora del concurso y tuvo que acudir a una segunda compañía. Finalmente, las obras comenzaron y el buen ritmo al que se están realizando permite que se pueda garantizar que Pajares vaya a estar lista para el inicio de la temporada
El director de la estación, Felipe García Pertierra, indicó que las labores consisten en la sustitución de varias piezas de seguridad en el remonte y los asientos. "Se han desmontado las sillas, se han reconocido todos los elementos de seguridad y ya se están cambiando los que hay que cambiar", explicó el responsable del complejo invernal lenense. García Pertierra adelantó que al ritmo que marchan los trabajos, los operarios barajan que la fecha en la que ya se podrán realizar las pruebas del remonte será el 28 de noviembre, es decir, el próximo viernes. Esto supone que el remonte, si todo sale según lo esperado, estaría operativo una semana antes del inicio oficial de la temporada.
Respecto a las previsiones de nieve para los próximos días, García Pertierra no se muestra demasiado optimista, aunque deja una ventana abierta: "El parte no nos da nieve de forma inminente, pero no es menos cierto que previsiones a más de tres o cuatro días no son fiables porque van variando constantemente". De momento, la estación se encuentra sin nieve, ya que los copos que hace quince días llegaron incluso a la base de la estación, dejando una capa de unos 15 centímetros, ya han desaparecido casi en su totalidad.
El telesilla cuatriplaza del Brañillín es el principal de la estación, une la base del complejo con la parte alta y mueve 1.600 personas a la hora. El pasado año se habilitó la silla para que también se pudiera bajar a la base.
