Llegue a casa y tire en el sofá mi mochila, y pasos seguido me tire yo en el sofá, había sido un día cansado, mire a mi lado derecho, ahí estaba como siempre la foto de Luhan y yo suspiré. Ya habían pasado 5 años y aun no me libraba de sus recuerdos.
Subí a mi habitación y saque la ropa que me pondría para descansar, pero entre mi ropa salto mi uniforme de la secundaria, lo tome y reí, aun olí a él, de todos los días que lo iba a ver a la preparatoria, suspiré de nuevo y camine por el pasillo, vi la cuerda que bajaba del ático, y me decidí a limpiarlo, ya que tenia literalmente años que no lo limpiaba, ahí estaban todas mis cosas del instituto. Baje la cuerda y las escaleras subí y una nube de polvo me recibió, baje de nuevo tosiendo y riendo, fui a la cocina sacando un plumero, cuando regrese me tape la boca y volví a subir, sacando el polvo de apoco, encontré un baúl, lo sacudí y baje, me senté en la sala y me la pase hojeando mis apuntes del instituto, moví unos libros y de la nada un pequeño libro salió de ellos
Lanzo lejos mi diario desgastado y de la nada, en las páginas abiertas
Estás claramente ahí, sigues igual que siempre
Recuerdo las fotos que olvide a esta época, escalofríos recorren mi cuerpo
Es un poco triste que no pueda volver a esos tiempos
Lo tome y me fije que era mi diario del instituto, lo hojee, había varias fotografías, mías, de JongIn, de KyungSoo, de Chanyeol, pero principalmente de Luhan, mi corazón se apretujo al ver los felices días que pasábamos juntos, no podía creer que todo eso ya no estaba conmigo, habían sido 4 años de relación con el, años que le dediqué, decidí dejar el diario, lo puse en la mesa de noche y volví a subir el Baúl. Llame a JongIn y KyungSoo, que estaban de vacaciones en Filipinas, me dijeron que les extrañaba mi llamada, ya que no me había puesto en contacto con ellos en 2 años, yo solo les dije que el trabajo me mantenía ocupado junto con la escuela, pero la verdad era que quería mantenerme alejado de todo lo que me recordara a Luhan, seguido llame a Chanyeol, le dije que si podía salir mañana, necesitaba hablar con alguien el acepto y nos citamos en un café cerca de mi facultad y su trabajo. Decidí que era hora de dormir un poco, sacudí mi pijama y me encamine a mi habitación, en el camino vi una hoja algo vieja, que supuse se debió haber caído del baúl, decidí dejarla en la mesa del pasillo y leerla después. A la mañana siguiente me bañe, y vestí, desayune y cuando estaba por tomar las llaves vi la hoja, decidí que la leería más tarde, salí de mi casa hacia la facultad. Ese día el profesor Kris nos dio la tarde libre, asi que fui a dar una vuelta al campus, paseando llegue al antiguo jardín de rosas, donde vi Luhan por última vez, mire todas aquellas rosas marchitas, todo ese dolor que albergaba dentro de mí tratando de esconder lo que en realidad sentía.
- Sehun-ah –Oí una voz que me saco de mis pensamientos
- ¿Qué sucede, Taozi? –le pregunte, el hizo un mohín de disgusto, pero sonrió y se acerco a mi
- ¿Estas bien? –Pronuncio mientras acariciaba mi mejilla húmeda, ya que en algún momento había empezado a llorar.
- No –Dije y me abrase a él, desde que había entrado a la facultad, Tao sabía todo acerca de mí, incluso lo que intentaba ocultar. Me solté del abrazo y seco mis mejillas
- Sehun –Dijo mientras me limpiaba la cara con sus manos- Tranquilo, esto, es normal –dijo sonriendo, yo simplemente no podía conmigo, no más me dolía, me dolía todo. Tao me llevo a casa ese día, se la paso hablando conmigo hasta que el profesor Wu llego por él, cuando se fue le dije que fuera con cuidado, ya que estaba peligroso salir asi tan tare, aunque fuera con el profesor, me tire al sofá y me puse a recordar todo, como de la nada todo se me había escapado de las manos. . .
Te iré a buscar al País de Nunca Jamás siguiendo a Campanita, que fue enviada por recuerdos
En ese lugar, tú y yo estamos buscándonos, sonriendo
Yo soy tu eterno Peter Pan, tu hombre que se ha detenido en el tiempo
Puede que sea torpe pero te amo tanto y correré hacia ti
Camine de la mano con Luhan, bueno en realidad corría, estaban por alcanzarnos, y no quería permitirlo, nadie se llevaría a Luhan de mi lado. Al final logramos entrara a un deposito de cosas que estaba al fondo de la escuela, Luhan y yo nos tiramos en los colchones, exhaustos, lo mire, estaba al borde del llanto
- Sehun –Pronuncio- ¿No podemos seguir juntos, sabes? –Se levanto del colchón dispuesto a salir, pero yo le detuve, toma su mano lo jale hacia mí y lo bese, lo atraje a mí y me acosté en los colchones con él, dimos vueltas hasta que quede yo sobre él, n ese recóndito lugar, a oscuras con la simple luz del atardecer hicimos el amor por última vez. Entrada la noche decidimos escapar, pero Luhan me miro y se fue corriendo sin explicación alguna, desde ese día desapareció.
Tiempo después en entere que se fue con su prometido a Londres, yo solo quería morirme, todo lo que había vivido junto a Luhan había sido una cruel mentira e ilusión. Decidí, terminar con todos esos sentimientos que me quedaban y me encerré en mi casa por días, semanas.
De pronto abrí los ojos y ya era de madrugada, recordé la cita que había hecho con Yol, asi que le marque.
- Si? –Dijo adormilado de la otra línea
- Yeol? Perdón por no ir hoy al café, me sentí mal y. . –me interrumpió
- Si, Taozi me llamo, me dijo que estabas con el –Dijo adormilado, entonces escuche una voz
- Channie, quien es a esta hora? –Dijo, sonreí
- Desperté a la bella durmiente? –Dije entre risas
- Discúlpame pero soy bello –Dijo riendo Baekhyun desde el otro lado. Colgué y me fui a mi habitación, dormí unas 13 horas, me desperté el sábado por la mañana, camine por el pasillo y vi la hoja vieja, asi que me decidí a leerla, me senté en el sofá y la abrí
“Sehun,
Probablemente esta carta jamás llegue a ti, ya que la escondí bien entre tus libros de la Universidad, quizá jamás la encuentres.
Quiero decirte, que jamás, jamás eh dejado de amarte pero no quiero que te hagan daño, espero algún día en tu corazón decidas perdonarme, por favor, algún día llámame, quiero saber que estas bien
Siempre tuyo, Luhan”
Deje caer el papel viejo y amarillo al suelo, deje caer mi peso en mi espalda, mire el numero grabado con tinta rosada al fondo del papel, mis ojos se humedecieron y me acerque al teléfono.
Recuerdo claramente el vencer a todos los villanos que te molestaban
Desde ese momento, tengo tu corazón e incluso compartimos un beso
Mi corazón rodo a las nubes y voló
Tú eras más bonita que Wendy o la Cenicienta
La única persona que ha hecho mi corazón palpitar
Tan pronto como te siento, mis ojos brillan
Nadie respondía, suspire y busque su dirección por internet tampoco la encontré, tire el papel y volví a llorar.
Pasaron varios meses desde que había decidió deshacerme de mi pasado, y ahora estaba en China, ceca de donde , solía vivir Luhan en Beijing, estaba loco, quizá.
Mientras caminaba camino hacia mi trabajo iba bastante distraído, los últimos días no lograba sacarme un presentimiento del pecho, algo que me estaba asustando. Justo al doblar en una esquina un pequeño choco conmigo, lo levante y al momento de ver su rostro me paralice, era igual a mí, solo que con unos ojos grandes y caseosos, con una mirada perdida. El niño me miro y me toco las mejillas
- ¿Quién es usted señor? –Dijo el niño tranquilo, yo reí
- XiaoLu! Ven acá –un joven se acerco al niño, pero de igual manera, me sorprendió cuando levanto la mirada- Sehun
- Luhan –solté, el niño me miro y toco mi mejilla, jalando el suéter de Luhan- ¿Por qué este niño se parece a mí, Luhan?
- Mira, se parece a papa –Dijo el niño, yo lo mire y Luhan lo tomo en brazos, el niño saco una fotografía mía, bastante vieja y me la enseño- ¿Eres mi papa? Mama siempre me dijo que volverías, volviste por mí? Vendrás con nosotros papa? –El niño m miro con sus grandes ojos
- El se fue y me dejo a mi suerte cuando supo que el niño era tuyo –Dijo, su voz quebrada mientras sonreía- Siempre te espere –Dijo derramando unas cuantas lagrimas, yo tome la mano del pequeño XiaoLu y le sonreí
- Si, vine por ustedes, para quedarme, por siempre jamás –Dije riendo, Luhan me abrazo, y yo a los dos. Jamás me había esperado eso.